"Margarita, está linda la mar,
y el viento
lleva esencia sutil de azahar:
tu aliento.

Ya que lejos de mí vas a estar,
guarda, niña, un gentil pensamiento
al que un día te quiso contar
un cuento."

Rubén Darío.

jueves, 11 de agosto de 2011

Respuesta inesperada.

El corazón no entiende de matemáticas
ni de las simples ni de las aplicadas.

El corazón siente el amor,
con eso le basta.
Deja a un lado cualquier razonamiento,
todo tipo de ciencia extraña
y se centra en sentir, sin conocimiento,
sensaciones que le embriagan el alma.