"Margarita, está linda la mar,
y el viento
lleva esencia sutil de azahar:
tu aliento.

Ya que lejos de mí vas a estar,
guarda, niña, un gentil pensamiento
al que un día te quiso contar
un cuento."

Rubén Darío.

sábado, 21 de enero de 2012

Fin.


No creo
Que te odie. No, eso no.
Pero ya no te quiero.
¡Qué raro el no hacerlo!


No creo 
Que te olvide. No, eso tampoco.
Pero ya no te recuerdo.
¡Una sensación extraña la que tengo!


No creo
Que te ame. Ya no.
Y sólo dudo de si lo he hecho.
¡Hasta que no venga otro amor no podré saberlo!


No te odio pero ya no te siento
Y lo que debiera 
sonar triste no suena
Porque quererte no, ya no te quiero.
Te dejé marchar 
mil veces, hasta que un día
se me olvidó recordarme que te quería.
Dejé de pensar que no te olvidaría
y tu recuerdo
fue desapareciendo de esta memoria mía.
Se me olvidaron tus palabras siempre mentiras
Y te dejé ir mientras tú sin saberlo...
Me perdías.